Chapecoense recibe al Nacional para jugar algo más que una final de Recopa
Chapecó está lleno de avisos y afiches que agradecen al equipo colombiano su solidaridad.
El Chapecoense y el Atlético Nacional se miden mañana, en la ida de la final de la Recopa Sudamericana, en el que los colombianos serán homenajeados por la ayuda que prestaron tras el accidente aéreo que acabó con casi la totalidad de la plantilla del club brasileño.
Los dos equipos jugarán en el estadio Arena Condá de la ciudad brasileña de Chapecó la final que nunca pudieron disputar en la Copa Sudamericana del año pasado, ya que el avión que transportaba al Chapecoense se estrelló poco antes de llegar al aeropuerto de Medellín la noche del 28 de noviembre.
El club brasileño tiene programada toda una serie de actividades para rendir homenaje a los "hermanos" colombianos por su ayuda en el accidente, que acabó con la vida de 71 personas, la mayoría integrantes de la primera plantilla, miembros de la comisión técnica y de la directiva, así como una veintena de periodistas.
Esa corriente de solidaridad llevó al Atlético Nacional, vigente campeón de la Libertadores, a pedir a la Conmebol que cediese el título de la Copa Sudamericana 2016 al Chapecoense, algo que finalmente se oficializó en diciembre pasado.
Ahora ambos se enfrentan por el título de la Recopa en sus condiciones de campeones de la Libertadores y de la Sudamericana.
"Aunque tengamos que mantener la rivalidad y competir, seguiremos siendo hermanos. Nada va a apagar de nuestras mentes y corazones el sentimiento de pena y nostalgia por lo que pasó", declaró el entrenador del Nacional, Reinaldo Rueda, a medios locales.
En total serán seis eventos para el mismo día del partido, "todos basados en una palabra clave: gratitud", señaló en un comunicado el Chapecoense, que, además, ha pedido a sus aficionados que acudan al estadio con una camiseta blanca.
Antes de que la pelota empiece a rodar se instalará una zona de aficionados en el centro de Chapecó, para desde ahí iniciar un paseo hasta el Arena Condá con objeto de realizar un "gran abrazo" al estadio.
El alcalde Luciano Buligon ha decretado incluso festivo a partir del mediodía del martes, con el fin de "convocar al mayor número de personas en un evento histórico para Chapecó".
En el plano deportivo, el Nacional realizó un entrenamiento este domingo en Sao Paulo y se espera que hoy llegue a Chapecó, donde será recibido por las autoridades en el aeropuerto.
Los colombianos llegan a este encuentro como líderes de la liga de su país tras el triunfo el pasado viernes sobre el Deportivo Pasto (2-1), lo que les deja con cierta ventaja en el torneo.
Será la segunda vez en su historia que disputará la Recopa Sudamericana, después la que perdió el 17 de marzo de 1990 en Miami ante Boca Juniors, por 0-1, en partido único.
Por su parte, el Chapecoense se consolidó este fin de semana en la punta del Campeonato regional Catarinense, donde acumula cinco victorias consecutivas y saca tres puntos de ventaja a su inmediato perseguidor, el Joinville.
El entrenador de la escuadra brasileña Vágner Mancini, que tomó las riendas del equipo tras la tragedia, insistió en entrar al campo "respetando la camiseta del Chapecoense y jugar de la mejor manera posible". "No hay mayor reconocimiento para ellos que ganar este título", manifestó el técnico en rueda de prensa.
El Chapecoense solo ha perdido dos de los ocho partidos que ha jugado en competiciones Conmebol, el último fue ante el Lanús argentino por 3-1, el pasado 16 de marzo, por Copa Libertadores
Será la primera vez que estos dos equipos se enfrenten en un partido de competición oficial para el que ya se han agotado las algo más de 20.000 localidades.
La vuelta entre Chapecoense y Atlético Nacional será el próximo 10 de mayo en el estadio Atanasio Girardot de Medellín.
EFE